miércoles, 4 de septiembre de 2013

Rosita Medina, ejemplo de las mujeres de Atenco

El cerco informativo contra los inconformes no solamente ocultó la detención arbitraria de la atenquense; tampoco mira las transformaciones cotidianas que trajo a este pueblo la defensa de su tierra. 

Mayra Irasema Terrones Medina
 
 
México. Los medios masivos de comunicación no han dicho nada de la detención arbitraria de la que fue objeto la atenquense Rosita Medina Moreno, acusándola de robar una ambulancia en la represión de 2006. Todo es parte del cerco informativo que se tiende sobre la vida y la resistencia de este pueblo mexiquense.

Desde el 23 de octubre del 2001, las mujeres atenquenses se destacaron por estar al frente de la defensa de su comunidad. Su participación y visión han contribuido a  mirar la lucha por la defensa de la tierra como la lucha por la reproducción de su vida y la de sus familias. Se han destacado por la reivindicación de su historia, la de abajo, lo que los abuelos y las abuelas les enseñaron.   Los campesinos y las campesinas de Atenco salieron a las calles a exigir respeto para sus antepasados, a luchar en contra de un proyecto aeroportuario que Vicente Fox Quezada calificó como el proyecto de su sexenio, proyecto que el Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra (FPDT) echó abajo,  logrando la derogación del decreto mencionado.

“Por favor abajo, lo que se resolvió fue abajo, y que sea información real, por favor”, decía Rosita Medina, del FPDT, a un reportero de TV Azteca,  el 3 de mayo de 2006, en el puente peatonal que se encuentra a la entrada de Atenco. Junto con otras de sus compañeras, bajaron a los reporteros de ese puente peatonal, pidiéndoles que digieran la verdad de los hechos ocurridos ese día en la carretera Texcoco- Lechería, algo que no sucedió.
Al contrario de la petición de las mujeres, los medios de comunicación masiva -particularmente TV Azteca y Televisa-, en coordinación con los gobiernos estatales, municipales y federal, establecieron un cerco informativo en donde se descalificó a los pobladores de Atenco de maneras diversas y dieron pauta para avalar la represión que sufrieron las comunidades atenquenses los días 3 y  4 de mayo de ese año, dejando un saldo de más de 200 detenidos, entre pobladores de la comunidades y organizaciones adherentes a La Otra Campaña.

Más de 30 mujeres de las 47 detenidas fueron violadas,  entre el 3 y 4 de mayo fallecieron Javier Cortés de 14 años, originario de San Francisco Acuexcomac, Atenco, y Alexis Benhumea, universitario y adherente a La Otra Campaña.

A estos  medios de comunicación se les olvidó mencionar el acuerdo que se llevó a cabo el 2 de mayo de ese año, entre los floristas, el FPDT y el síndico municipal de Texcoco , en donde acordaron que se les permitiría a los floristas poner sus puestos el 3 de mayo.  Omitieron por completo el hecho de que cuando los floristas llegaron acompañados por el FPDT para poner sus puestos, el mercado de Texcoco estaba rodeado de granaderos, se les olvidó decir que había mujeres y niños, incluso de brazos, en la casa en donde acorralaron  a los floristas y a los integrantes del FPDT.

Se les olvidó la forma en la que detuvieron a las y los compañeros ese día, y trataron de inculpar a la comunidad atenquense por  la muerte de Javier Cortés, siendo que a este joven le había disparado un policía frente a  toda la comunidad. Ni siquiera se les ocurrió cuestionarse por qué había tanto enojo entre los pobladores de estas comunidades, había tres razones fundamentales: el incumplimiento a un acuerdo ya hecho, la detención arbitraria de los floristas y los integrantes del FPDT  que se encontraban en Texcoco y la muerte de un joven a plena luz del día.

Era el mundo al revés,  los pobladores eran los violentos y los policías armados eran las víctimas de un grupo de personas, que según Enrique Peña Nieto, siendo gobernador del Estado de México (2005-2011), declaró que “no representaban a toda la comunidad de Atenco”.

El 3 y 4 de mayo de 2006, los gobiernos en turno y los medios de comunicación mostraron a todos los pobladores de México la forma en la que se manejarían en adelante. No es casualidad, es una estrategia.

Tampoco han dado cuenta de la forma en la que han sido acosadas la comunidades de Atenco, que desde el 2006 hasta el 2010 tuvieron que luchar por la liberación de los presos que fueron injustamente encarcelados, exigiendo justicia para las mujeres violadas en el operativo mencionado y por los asesinatos que se cometieron. No han mencionado que desde el 2003 hasta la fecha,  la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA) y la Comisión Federal de Electricidad (CFE) cerraron seis de sus ocho pozos de agua, lo cual ha dificultado la siembra en sus terrenos de riego; que en el 2009 se puso en marcha un proyecto fantasma, denominado “Zona de Mitigación  Ecológica  del Ex Lago de Texcoco”, que disfrazado de ambientalista  y con el aval de la CONAGUA, incitó a la venta de tierras en el municipio para un proyecto que hasta ahora no se ha llevado a cabo, y que se encuentra en el mismo polígono en el que se pretendía llevar a cabo el  proyecto aeroportuario. Tampoco se ha dicho nada sobre  la especulación de tierras que  ICA, OHL Concesiones y Alter Consultores emprendieron desde el 2010, intentando engañar a los comisariados ejidales y ofreciendo cada vez más dinero por hectárea- todas son empresas cercanas a Enrique Peña Nieto.

No se ha dicho nada de la detención arbitraria que Rosita Medina Moreno sufrió el 28 de agosto de 2013, acusándola de robar una ambulancia en los hechos del 3 y 4 de mayo, acusación que el juez desestimó porque la ambulancia nunca fue sustraída y no existía razón alguna para detenerla, golpearla y trasladarla al penal del Molino de Flores.

El cerco informativo contra “los inconformes” se intensifica.
Estos medios han tenido que buscar la forma de ocultarle al país entero el cerco paramilitar que mantienen de forma constante contra las comunidades zapatistas, el acoso a la comunidad de Acteal por paramilitares que llevaron a cabo la masacre de 1997 y que hoy día están libres, el acoso e injusticia que han sufrido las comunidades de Mitzitón y Bachajón, en Chiapas, por oponerse a la construcción de una carretera, las intenciones de inundar un pueblo como el de Temacapulín, en Jalisco, la lucha por el agua de los yaquis, la oposición a la construcción de la termoeléctrica en la comunidad de Huexca, Morelos, la lucha del pueblo tepozteco, la firme decisión de Atenco por seguir defendiendo sus tierras a pesar de ellos, así como muchas otras realidades.

El 2006 marcó la pauta para darnos cuenta de cómo se configuran estos grupos de poder en México. Pero la lucha por la tierra, por la reproducción de la vida, por la dignidad de los mexicanos, ha crecido también.
A los medios de comunicación también se les olvidó decir que los pobladores de Atenco se movilizaron desde que supieron de la detención de la compañera Rosita Medina, que marcharon al penal exigiendo su liberación inmediata, a unas horas de que la habían detenido. Se les olvidó mencionar que las comunidades y pueblos que son descalificados por ellos, se están organizando.

En el caso de los atenquenses, se ha logrado resignificar su historia, y su cotidianidad ha sido modificada desde que los pobladores decidieron defender sus tierras. Se transformaron sus espacios de convivencia, su visión del mismo pueblo y de nuestra realidad nacional.

En el 2001 el tejido social de los atenquenses sufrió una ruptura. En las cocinas de cada familia tuvieron que decidir su posición frente al decreto expropiatorio. Pareciera natural que los atenquenses se sintieran agraviados ante el despojo que Vicente Fox había llevado a cabo, sin embargo no fue de inmediato la reacción. La discusión al interior de las familias fue muy intensa y muchas de ellas hasta fecha han sufrido una ruptura importante. Algunos han comentado que el decreto les quitó a una parte de su familia pero les dio a otra, una familia que se cohesiona en primer momento por el reconocimiento de sus antepasados, y por una identidad histórica, por la coincidencia en la decisión misma de defender la tierra y no valorizarla, así como la generación de un espacio colectivo con base comunitaria que les permite tomar en sus manos la demanda de mejoras de su propio pueblo.

Esta familia que lucha, también ha modificado sus espacios de convivencia, ya que la relación con organizaciones sociales de la ciudad, de otros estados de nuestra patria, y con movimientos sociales internacionales, les han permitido generar otras relaciones sociales hacia afuera de su comunidad.

El trabajo solidario interno y externo que llevan a cabo algunos de los integrantes del Frente, la puesta en marcha de  proyectos productivos, las visitas que hacen y les hacen otras organizaciones hermanas, explicando una y otra vez el sentido de su lucha. Los elotes y  el grito alterno al del municipio del 15 de Septiembre, su participación en el carnaval con comparsas y en las mayordomía, en la fiesta chica y grande, los sembradores, la coronación de la reina en el movimiento, las fiestas de quince años, bodas, bautizos, primeras comuniones, la el homenaje a los compañeros y las compañeras que se han adelantado,  las piñatas en diciembre y los tamales que ofrecen en los espacios reconocidos como el lugar donde se juntan los del movimiento  para llevar a cabo eventos culturales y políticos , donde se llama a asamblea de pueblo cada vez que se ven amenazados de nuevo por el proyecto aeroportuario, donde  se puede encontrar información, donde se hacen acopios, donde el poblador puede encontrar ayuda legal, sentimental y familiar.
A estas élites económicas y políticas, a los medios de comunicación alineados a ellos, se les olvida que más allá del despojo que se configura desde sus intereses, está la resistencia que lucha por lo común.

Publicado el 02 de septiembre de 2013
http://desinformemonos.org/2013/09/rosita-medina-ejemplo-de-las-mujeres-de-atenco/